La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) prohibió la comercialización de un aceite por imitar a una reconocida marca y recomendó no consumirlo tras detectar una falta de registros sanitarios y datos falsos en su envasado. El producto fue declarado ilegal.
La elaboración, distribución y comercialización de un aceite de girasol fue prohibido por la Anmat en todo el territorio argentino por una serie de características ilegales. Este se fraccionaba simulando la reconocida marca “Cocinero”. El productor de la marca original se desligó de los envasados y acusó que se trata de una copia riesgosa para el consumo.
La empresa “Molinos Río de La Plata S.A”, fabricante del aceite original, detectó la comercialización de los falsificados en locales de la provincia de Buenos Aires y se lo comunicó al Departamento de Vigilancia Sanitaria y Nutricional de los Alimentos del INAL, según indican desde el informe del Gobierno Nacional.
Las diferencias a tener en cuenta para no caer en engaños
La empresa detalló en un documento cuáles eran las diferencias más significativas y notables entre el producto original y el falsificado.
En primer lugar, la impresión del número de lote muestra falencias, ya que en el envase original, se encuentra grabado con láser y sigue el formato de fecha día/mes/año, mientras que la versión fraudulenta utiliza inkjet y muestra la fecha en el orden año/mes/día.
Por otro lado, la descripción del proceso de producción contiene un error ortográfico. En esa misma línea, las asimetrías comparando con el aceite cocinero siguen: omisión de datos sobre el molde de soplado y reciclaje en la etiqueta del producto adulterado, variaciones en la altura del envase y una calidad inferior del plástico, que en la versión falsa es más opaco y menos resistente.
¿Qué comunicó la Anmat?
Debido a la falta de registros sanitarios y al uso indebido de la identidad de Molinos Río de la Plata S.A., la Anmat declaró que el producto es ilegal. En consecuencia, se ordenó su prohibición en todo el territorio nacional.
En se sentido, el organismo nacional ha recomendado a la población la abstención del consumo de este aceite, ya que no pueden garantizarse su origen, etapas de producción, condiciones de elaboración o su calidad con adecuados niveles de control bajo las condiciones establecidas por la normativa vigente y su inocuidad.