“Cada vez que recuerda lo que ocurrió, (Facundo) Lencina llora. Está en estado de shock por la muerte de (Lucas) Delgado. Quiere reunirse con su familia para pedirles perdón por todo lo que sucedió”, explicó Augusto Avellaneda, el abogado del oficial de Policía que protagonizó el tiroteo mortal en el que murieron dos sospechosos de robo y un joven que quedó atrapado en el fuego cruzado.
El miércoles, cerca de las 21:00 en la avenida América al 1.400, según la teoría del fiscal Carlos Sale, que estaba vestido de civil, Cristian Legname y Samuel Alberto Gallardo lo abordaron mientras se desplazaban en una motocicleta. Según el fiscal, Gallardo apuntó al oficial con un arma, que luego se confirmó que era de juguete, y le arrebató el teléfono celular y la billetera.
Cuando el ladrón comenzaba a huir, según la versión del fiscal, el oficial se identificó como policía y les ordenó detenerse. Los jóvenes no obedecieron y Gallardo disparó dos veces con la réplica de arma que tenía, lo que llevó a Lencina a sacar su arma reglamentaria y efectuar al menos 12 disparos, encontrándose 14 casquillos en el lugar.
Dos de esos disparos impactaron en Legname, mientras que cuatro alcanzaron a su cómplice. Además, uno de los proyectiles hirió a Delgado, quien hacía ejercicios en el lugar. Fue detenido esa misma noche y permaneció casi 24 horas bajo custodia en la sede de la división de Homicidios.

Cuando se le levantó la detención, el fiscal Sale informó oficialmente al oficial que estaba siendo investigado por homicidio simple agravado por el uso de un arma de fuego, un delito que conlleva una pena de 12 a 24 años.
Respecto a la muerte de los dos jóvenes, el representante del Ministerio Público demostró que Lencina actuó dentro de la legalidad. Hasta el momento, ha recopilado varios testimonios que respaldan la versión de Lencina.
El fiscal no solicitó prisión preventiva por dos razones: primero, porque no ha acusado al oficial de ningún delito en este momento y, segundo, porque no parecía que hubiera riesgo de que obstruyera la investigación o que intentara huir, ya que desde el principio manifestó su deseo de colaborar en la investigación.
Según fuentes judiciales, el fiscal ha decidido esperar los resultados de algunas pericias clave, como los informes balísticos y planimétricos del lugar, antes de definir los pasos procesales a seguir. “Cuando tenga todos los elementos, solicitará una audiencia para formular los cargos en su contra”, explicó una persona cercana al investigador.
Posición
“Lencina está muy afectada por todo lo que está viviendo. Sinceramente, no se dio cuenta de que el joven estaba en el lugar. Disparó porque temía por su vida. Además, no tenía forma de saber que el joven estaba corriendo por ese lugar” , comentó Avellaneda.
El oficial de 28 años, que presta servicio en la comisaría de Villa Carmela, es soltero y no tiene hijos. Aún vive con sus padres. “Toda su familia está conmocionada por lo que ha pasado. Solo va una vez a la semana a buscar a su novia en el trabajo, por lo que no se puede decir que esto estuviera planeado”, enfatizó el abogado.
Lencina fue puesto en disponibilidad hasta que se aclare su situación procesal, por lo que solo podrá recibir el 50% de su sueldo. Puede ser reincorporado al servicio, pero desempeñará funciones administrativas, ya que no se le devolverá su arma hasta que concluya el proceso.
El abogado indicó que no está preocupado por la muerte de los jóvenes que lo asaltaron, ya que actuó de acuerdo con la ley. “La gente debe entender que los policías deben cumplir con su deber, ya sea estando de servicio o no. Por eso, la mayoría de ellos porta su arma reglamentaria. Él actuó como un buen oficial, se identificó como policía y solo disparó cuando su vida estaba en peligro. Podría haberse quedado en silencio, pero cumplió con su deber. No se arrepiente de eso”, añadió en una entrevista con el diario La Gaceta.
“No solo hizo eso, sino que también llamó al servicio 911 ya la ambulancia del 107 para solicitar ayuda. Lo que ocurrió después fue realmente una tragedia que lo atormenta desde ese día”, señaló Avellaneda.
“Cuando llegaron sus compañeros, le entregaron su arma reglamentaria y relató lo que había sucedido. Estos detalles fueron importantes para que el fiscal no decidiera mantenerlo detenido”, agregó.
El abogado señaló que Lencina no había visto a Delgado, quien quedó atrapado en medio del fuego cruzado.
“Vamos a demostrar que no había manera de que lo viera. Estaba oculto entre los árboles, además de que era de noche y el joven desafortunado vestía ropa oscura”, explicó.
“Además, hay otro detalle: estoy esperando los resultados de una pericia, ya que sospecho que uno de los proyectiles podría haber rebotado en el pavimento joven antes de herir mortalmente al. Lucharemos por demostrar que no hubo intención de matarlo, que fue un accidente y que Lencina está destrozado emocionalmente por lo sucedido”, destacó. Avellaneda reconoció que Lencina ya había estado involucrado en otros tiroteos, pero nunca cuando estaba fuera de servicio. “El fiscal debe considerar el contexto, la realidad y la historia reciente antes de presentar cargos formales en su contra. Nadie puede olvidar que hace menos de dos meses, dos policías fueron asesinados mientras intentaban robar una motocicleta. Aunque muchos no lo crean, esas situaciones se mantienen en alerta a muchos oficiales”, subrayó.
El lunes, cuando se reanude la actividad en Tribunales, se comenzará a definir la causa. En la fiscalía que conduce Sale ya se presentaron abogados que fueron contratados por los familiares de Gallardo y de Legname para que controlen la investigación. También lo haría la familia Delgado que definirá si asumirá el rol de querellante en la causa.