El clima en San Martín de Tucumán no es el mejor. Tras un 2024 marcado por el fracaso deportivo al no lograr el ansiado ascenso, el club enfrenta serios desafíos que van más allá del terreno de juego. Los problemas económicos, la incertidumbre sobre los patrocinadores y la falta de un proyecto claro han dejado al club en una posición complicada. En este contexto, la directiva evalúa la posibilidad de oficializar a Ariel Martos como director técnico del equipo principal para el 2025, una decisión que parece estar motivada más por la necesidad que por la convicción.
Un panorama financiero crítico
El fracaso deportivo no es el único problema que enfrenta el club. La posible desvinculación de La Caja Popular de Ahorros como principal patrocinador ha generado gran preocupación entre los dirigentes y los hinchas. Este sponsor, clave para el financiamiento del club en los últimos años, representaba una parte significativa del presupuesto anual. La salida de este apoyo financiero obligaría al “Santo” a reducir drásticamente sus gastos, poniendo en jaque tanto las contrataciones como el mantenimiento general de la institución.
La reducción del presupuesto también impacta directamente en la búsqueda de un nuevo entrenador. Los nombres de Rubén Forestello y Gustavo Coleoni, dos candidatos que generaban ilusión entre los hinchas, quedaron descartados debido a sus elevadas pretensiones salariales. Esto llevó a la directiva a buscar una alternativa más económica y accesible.
Ariel Martos, un hombre de la casa
En este escenario, el nombre de Ariel Martos comienza a ganar fuerza. Martos es un viejo conocido del club: ha trabajado como entrenador en las divisiones inferiores y ha formado parte de varios cuerpos técnicos interinos en los últimos años. Su sentido de pertenencia y conocimiento de la institución lo convierten en una opción viable, aunque no necesariamente ideal.
Si bien su oficialización aún no ha sido confirmada, fuentes cercanas a la dirigencia aseguran que su designación como técnico principal podría ser inminente. Su cercanía con el club y su predisposición para asumir el cargo en un momento tan complicado son factores que juegan a su favor. Además, su salario sería considerablemente más bajo en comparación con otros entrenadores del mercado, algo que resulta atractivo para la dirigencia en el actual contexto financiero.
Un 2025 lleno de desafíos
La posible llegada de Martos como técnico principal marcaría el inicio de un 2025 lleno de incertidumbre para San Martín. Con un panorama económico desolador, el club tendrá que ajustar sus expectativas deportivas y adaptarse a un modelo más austero. Esto podría significar la promoción de jugadores de las inferiores, un camino que Martos conoce bien debido a su experiencia en la formación de jóvenes talentos.
Sin embargo, la designación de Martos no está exenta de riesgos. Su falta de experiencia al frente de un equipo profesional en un torneo de alta competencia genera dudas sobre su capacidad para liderar al “Ciruja” en un contexto tan adverso. La presión de los hinchas, la necesidad de resultados inmediatos y la escasez de recursos serán desafíos constantes para el posible nuevo técnico.
Una decisión por conveniencia, no por convicción
La decisión de apostar por Ariel Martos parece ser más una cuestión de conveniencia que de convicción. Ante la falta de recursos económicos y las limitaciones para contratar a un técnico de renombre, la directiva optaría por una solución interna que permita mantener cierta estabilidad en el corto plazo.
No obstante, esta elección también podría interpretarse como una apuesta por un proyecto más local y sustentable, basado en el trabajo con jugadores jóvenes y en el fortalecimiento de las raíces del club. Si bien el camino no será fácil, una gestión acertada podría dar frutos a mediano y largo plazo, devolviendo al “Santo” a la senda del protagonismo en el fútbol argentino.
La voz de los hinchas y el futuro del club
La posible designación de Martos ya ha generado opiniones divididas entre los hinchas. Mientras algunos valoran su sentido de pertenencia y su conocimiento del club, otros consideran que se necesita un técnico con mayor experiencia para enfrentar los desafíos que se avecinan.
Por ahora, San Martín de Tucumán se encuentra en una encrucijada. Con problemas financieros, un futuro deportivo incierto y una hinchada exigente, el club deberá tomar decisiones estratégicas para salir adelante. Si Ariel Martos asume el cargo, será el encargado de liderar al “Ciruja” en uno de los momentos más complicados de su historia reciente. El tiempo dirá si esta apuesta resulta ser la solución que el club necesita o si, por el contrario, profundiza aún más su crisis.
Fuente: La Gaceta