Este martes se vivió una nueva jornada de bronca, espera y desesperación de los jubilados en la puerta de la sede del PAMI Tucumán.
Es que la entidad afirma que no hay sistema para atenderlos y las urgencias deben colmarse de paciencia.
A ello se les suma que la cobertura en la compra de medicamentos no está funcionando y los afiliados deben recurrir a su propio bolsillo para costearlos. Otros, debieron pagar las consultas con los médicos y sin ninguna oportunidad de reintegro.
Este martes se vivió una nueva jornada de bronca, espera y desesperación de los jubilados en la puerta de la sede del PAMI Tucumán.
Es que la entidad afirma que no hay sistema para atenderlos y las urgencias deben colmarse de paciencia.
A ello se les suma que la cobertura en la compra de medicamentos no está funcionando y los afiliados deben recurrir a su propio bolsillo para costearlos. Otros, debieron pagar las consultas con los médicos y sin ninguna oportunidad de reintegro.