El Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán se encuentra en medio de un clima de tensión y enfrentamientos políticos mientras avanza el tratamiento del Presupuesto 2025. Este debate, que promete ser uno de los más intensos del año, ha puesto en el centro de las críticas a la gestión de la intendenta Rossana Chahla, cuestionada por la oposición por la falta de transparencia en el manejo de los recursos públicos.
![Presupuesto 2025: críticas y cuestionamientos a la gestión de Rossana Chahla en la Capital 1 Rossana Chahla](https://tucumandigital.com.ar/wp-content/uploads/2024/12/IMG_0147.webp)
En la jornada de ayer, representantes del equipo municipal participaron de una reunión con la comisión de Hacienda para presentar las proyecciones presupuestarias y responder preguntas. Sin embargo, el encuentro no logró despejar las dudas ni apaciguar las críticas de los ediles opositores, quienes han señalado graves deficiencias en la ejecución presupuestaria del año en curso y la falta de información clara sobre el destino de los fondos.
Falta de transparencia y acusaciones cruzadas
El secretario de Gobierno, Martín Viola, intentó defender la gestión de Chahla ante las acusaciones de los concejales opositores José María Canelada y Gustavo Cobos, quienes reclaman informes detallados sobre el uso de los recursos municipales. Los ediles denunciaron que el Municipio no ha cumplido con las obligaciones legales de presentar informes trimestrales ni la cuenta de inversión 2023, instrumentos fundamentales para garantizar el control y la transparencia en el uso de los fondos públicos.
En su respuesta, Viola aseguró que “toda la documentación fue enviada en tiempo y forma”, pero no presentó pruebas concretas que respalden su afirmación. Además, arremetió contra los concejales, acusándolos de “mediatizar” sus reclamos. “Mientras nosotros trabajamos por los vecinos, otros prefieren generar confusión con reclamos inconducentes. La gente está cansada de este tipo de política”, expresó en su cuenta de X.
Un presupuesto bajo sospecha
El proyecto enviado por la Intendencia para el ejercicio 2025 prevé ingresos y egresos por $317.683 millones, de los cuales el 94% está destinado al Departamento Ejecutivo, mientras que solo el 6% corresponde al Concejo Deliberante. Este reparto ha sido señalado por la oposición como un ejemplo de la discrecionalidad con la que se manejan los fondos en la gestión de Chahla.
Además, el documento incluye objetivos estratégicos como la mejora del transporte público, la atención ciudadana y la ejecución de obras públicas. Sin embargo, la oposición ha cuestionado la viabilidad de estos objetivos, señalando que muchas de las promesas realizadas por Chahla al inicio de su gestión no se han cumplido. “El presupuesto proyecta cifras que no se condicen con la realidad de los vecinos, que ven una ciudad cada vez más deteriorada”, afirmó uno de los ediles críticos.
El fracaso del diálogo político
La reunión de ayer, que contó con la presencia de los secretarios Alejandro Sami (Ingresos Municipales) y Sebastián Ruiz Toscano (Economía y Hacienda), buscaba ser un espacio para esclarecer dudas y generar consenso. Sin embargo, terminó evidenciando la falta de diálogo entre el oficialismo y la oposición.
El presidente de la comisión de Hacienda, Emiliano Vargas Aignasse, intentó minimizar las críticas y defendió la gestión municipal. “La cuenta de inversión está disponible, pero pareciera que algunos ediles buscan más mediatizar la situación que aportar al debate”, señaló. Sin embargo, su respuesta fue vista como insuficiente por los opositores, quienes aseguraron que no han recibido la documentación necesaria para evaluar el presupuesto con responsabilidad.
Un escenario de desgaste político
Para la gestión de Rossana Chahla, este debate se ha convertido en un terreno de desgaste político, donde los cuestionamientos sobre la falta de transparencia y los resultados limitados de su administración se hacen cada vez más visibles. La falta de diálogo, sumada a los reclamos sobre el manejo de los recursos públicos, pone en evidencia las debilidades de una gestión que enfrenta críticas tanto de la oposición como de los vecinos.
Con un presupuesto que busca ser aprobado antes de fin de año, el oficialismo tendrá que esforzarse para disipar las dudas y demostrar que está a la altura de las expectativas. Por ahora, el clima político en San Miguel de Tucumán refleja un escenario de desconfianza y confrontación, donde las promesas de eficiencia y transparencia de la gestión de Chahla parecen cada vez más difíciles de sostener.