Realizar un tanto «desde el vestuario» es un principio básico del fútbol que se refiere a los goles anotados de manera rápida, apenas unos segundos después de comenzar un partido o el segundo tiempo. Cristoph Baumgartner, jugador de la Selección de Austria, lo llevó a cabo. Este sábado, en un encuentro amistoso de su selección contra Eslovaquia, anotó a los seis segundos y consiguió el gol internacional más veloz en la historia del fútbol.
El futbolista del equipo alemán RB Leipzig dejó a todos sorprendidos con su acción. Austria inició el juego y Baumgartner dribló a los jugadores de Eslovaquia, esquivando a uno, luego a otro y finalmente a otro más. Cuando se encontró en posición para disparar al arco, no dudó: pateó. Su disparo se coló en un ángulo, lejos del arquero eslovaco, quien no pudo hacer nada al respecto.
El gol de Baumgartner llegó a los seis segundos del partido y fue un segundo más rápido que el récord previo a nivel de selecciones, que pertenecía al alemán Lukas Podolski frente a Ecuador en 2013. Curiosamente, ese mismo sábado, el alemán Florian Wirtz también marcó un golazo a los siete segundos en un amistoso contra Francia y estuvo cerca de igualar la hazaña de Baumgartner.
El récord mundial: el gol más rápido de la historia
El gol más rápido de la historia, sin embargo, fue aún más veloz. Sucedió en Uruguay, según los registros oficiales del libro Guinness de los récords. Fue en menos de tres segundos y fue realizado por Ricardo Oliveira, quien disparó desde el centro del campo y anotó el gol para Río Negro Capital contra Soriano Interior en el Torneo Regional de Uruguay y se registró a los 2,8 segundos del partido.
El gol más rápido en Argentina
En Argentina, el gol más veloz de la historia lo logró Julián Rodríguez Seguer en 2023, jugando para Liniers contra JJ Urquiza, a los cuatro segundos del partido. Así igualó una marca de Luis Torres con Acassuso en 1996. En la primera división, el gol más rápido fue anotado por Carlos Dantón Seppaquercia, jugando para Gimnasia La Plata, contra Huracán, a los cinco segundos, en 1979.