La pareja de una mujer embarazada solicitó asistencia médica para su traslado debido a que estaba experimentando dolores. Sin embargo, el parto ocurrió en las afueras del Hospital Avellaneda, y el bebé fue atendido por un agente del Servicio Penitenciario.
El comisario Juan Cruz, el segundo jefe de la Comisaría Décima relató que "a las 05:00 horas de este domingo, un hombre se presentó en la comisaría solicitando con urgencia un vehículo o una ambulancia para su esposa, quien se encontraba en su domicilio en la calle Martín Berho al número 800 y estaba experimentando dolores de parto". ".
Debido a la urgencia, se puso a disposición un vehículo de la comisaría, y la agente del Servicio Penitenciario, Katia Santillán (la única mujer en el turno de guardia), colaboró en el traslado de la mujer al Hospital Avellaneda.
Cuando llegaron a la entrada del hospital, "la agente recibió al bebé en sus manos, ya que la placenta era visible.
Así que se encargó de ayudar en el nacimiento y sostuvo al recién nacido en sus brazos hasta que el personal de guardia del hospital llegó con mantas para realizar el corte del cordón umbilical y colocar al bebé en una camilla para su ingreso”, explicó Cruz.
Posteriormente, los profesionales de guardia informaron que tanto la madre como la hija fueron trasladadas al área de maternidad y se encontraron en buen estado de salud bajo observación.