Los empleados de la Casa de Gobierno fueron desalojados por segundo día consecutivo por una amenaza de bomba, una constante en las instituciones de la provincia en los últimos meses.
Según lo que se informó, la advertencia provocó que las autoridades tengan que intervenir en el edificio minutos después de las 19. Se activó el protocolo de seguridad. La Policía verificó el caso, mientras los empleados esperaron afuera del edificio.
Un caso similar ocurrió ayer a la mañana, cuando los trabajadores tuvieron que salir del palacio gubernamental como consecuencia de una amenaza.
“Hubo una amenaza falsa, vía telefónica, y se aplicó el protocolo”, había comentado el ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa.