Un peligroso criminal de Tucumán, quien llevaba una tobillera electrónica y estaba bajo arresto domiciliario, es buscado por la policía en Santiago del Estero. Se le acusa según publica El Liberal de ingresar a varias residencias, cometer robos y asaltar a un empresario local, huyendo con un cuantioso botín.
La investigación se inició tras las denuncias de las víctimas que vivían en urbanizaciones privadas en la zona sur de la capital de Santiago del Estero. Los investigadores pronto notaron que todos los incidentes compartieron características similares.
Uno de los incidentes que se le imputa involucra el asalto a un empresario destacado, quien fue víctima de un atraco violento en el cual al menos dos criminales adquirieron un gran botín.
Después de varios días de meticulosa investigación, análisis de grabaciones de seguridad y entrevistas, se prolongará que los presuntos delincuentes eran un padre e hijo de Tucumán. El mayor, identificado como Sergio Tripolone, tenía un extenso historial delictivo, había sido condenado y estaba bajo arresto domiciliario.
Con todas las pruebas recopiladas, la fiscalía solicitó al juez de Control y Garantías, Dr. Darío Alarcón, órdenes de allanamiento y detención para los acusados. Como resultado, un equipo policial se dirigió a Tucumán para buscar a los supuestos responsables de los robos en territorio santiagueño.
Las fuentes judiciales revelaron que el padre, Tripolone, gozaba de arresto domiciliario y que su pulsera electrónica nunca mostró alertas, incluso cuando se alejó de su lugar de residencia, en contra de las instrucciones de las autoridades.
Los investigadores de Santiago del Estero, en colaboración con la policía de Tucumán, llevaron a cabo los allanamientos, pero no lograron encontrar a los sospechosos. Repitieron la operación al día siguiente, sin éxito nuevamente. Nadie pudo explicar las razones detrás de sus ausencias, ni si hubo filtraciones de información.
Sergio Tripolone, conocido por su experiencia en evadir la captura, ha sido mencionado en numerosos casos de robos durante las últimas dos décadas, tanto en Tucumán como en otras provincias. Hace algunos años, fue arrestado en Rosario, Santa Fe, donde supuestamente lideró una banda de temidos asaltantes.
El nombre de Tripolone se hizo famoso por su participación en uno de los homicidios más notorios en Tucumán en los últimos años. En septiembre de 2007, estuvo involucrado en un enfrentamiento con una marcha de aproximadamente 300 personas de la Dirección de Vialidad, en medio de un conflicto gremial y político.
Tras un juicio que tuvo lugar 12 años después, los acusados fueron condenados. Moisés recibió una pena de 15 años de prisión y Tripolone una de 8 años.
Hasta el momento del juicio por el asesinato de Ramón Paz, Tripolone había estado fugitivo en dos ocasiones, retrasando así los procedimientos judiciales.
Por razones que aún no se han revelado, la Justicia le concedió a Sergio Tripolone el beneficio del arresto domiciliario antes de cumplir la mitad de su condena. El juez dispuso que fuera monitoreado con un dispositivo electrónico.
Debido a que las autoridades santiagueñas no lograron ubicarlo, la jueza de Ejecución de Tucumán, Dra. Ana María Íacono, emitió una orden de captura a nivel nacional e internacional.
“Se llevó un cabo varias diligencias para intentar capturarlo, pero nunca pudieron localizarlo. Es evidente que no se encuentra en la provincia”, afirmó una fuente cercana a la investigación.
Se presume que Tripolone es experto en eludir a la captura. Las veces anteriores que estuvo prófugo, solo fue recapturado cuando se le detuvo por participar en otro delito. “Tiene conexiones en varias provincias ya que se ha desplazado por todo el país”, señaló una fuente. Informes de inteligencia indican que podría estar escondido en Buenos Aires.