Paula P., del Poder Judicial de Río Negro, fue echada luego de ser ñoqui premium. Cobraba su sueldo mientras figuraba como empleada activa en otros dos organismos públicos y tenía una interminable licencia de 400 días.
Una empleada del Poder Judicial de Río Negro fue exonerada de su cargo luego de que una auditoría interna revelara que acumuló más de 400 días de licencia en apenas cuatro años y que, además, trabajaba simultáneamente en otros dos organismos públicos.
Según publicó la periodista Cinthia Ruth en Infobae, Paula P. comenzó a ser investigada en mayo de 2024 por disposición del coordinador de Recursos Humanos de la Procuración General, Esteban Aliani. La investigación determinó un patrón de ausencias reiteradas, justificadas mediante certificados médicos y licencias extraordinarias entre 2019 y 2023. Durante ese período, la empleada incluso se mudó a Neuquén durante la pandemia, sin dejar de cobrar su sueldo como trabajadora judicial rionegrina.
Las irregularidades se confirmaron con oficios enviados a la AFIP y a la ANSES, los cuales comprobaron que Paula P. también prestaba servicios en la Municipalidad de San Martín de los Andes y en la Obra Social de Petroleros Privados. Esta situación resulta incompatible con el cargo que ocupaba en el Poder Judicial, según establece la legislación vigente.
A pesar de alegar desconocimiento de la normativa y atravesar situaciones personales difíciles, los instructores del sumario determinaron que su conducta violó los artículos 8 inciso a) y 9 de la Ley Orgánica 5731 y la Ley de Ética Pública L3550.
El Superior Tribunal de Justicia resolvió su exoneración definitiva el 12 de febrero de 2025. Además, ordenó remitir las actuaciones a la Fiscalía de Investigaciones Administrativas, que deberá evaluar si corresponde iniciar una causa penal por el posible perjuicio económico al Estado derivado de los salarios cobrados durante sus ausencias injustificadas.
Fuente: Sin Codigo Tucumán