El peronismo tucumano se encuentra en una situación crítica, donde sus principales referentes muestran posturas totalmente opuestas. Mientras Osvaldo Jaldo intenta seguir la línea de Milei, Javier Noguera y Pablo Yedlin buscan madrinazgo en Cristina Kirchner.
El legislador Javier Noguera, acompañado por el diputado Pablo Yedlin, tuvo una reunión este miércoles con la ex presidenta Cristina Kirchner en el Instituto Patria de Buenos Aires. Durante el encuentro, anunciaron que la referente política condenada por corrupción tiene planes de visitar Tucumán en abril del próximo año. La alineación de Jaldo con Milei causó enojo en las entrañas del justicialismo y hasta se rumorea una posible intervención partidaria en Tucumán.
En el escenario político actual las piezas comienzan a ubicarse en sus lugares, estos desplazamientos llegan al Partido Justicialista y marcan una línea cada vez más gruesa: Kirchnerismo de un lado y peronismo del otro. Esa parece ser la dualidad que sufre hoy el oficialismo tucumano. Y tal vez lo sufra más aun mañana. En un nuevo año electoral, no se descarta una feroz interna peronista y hasta existe la posibilidad de ver listas divididas; profundizándose esto con l inminente suspensión de las PASO.
“Hoy mantuvimos un diálogo constructivo con nuestra compañera presidenta del Partido Justicialista @CFKArgentina y nuestro diputado @pyedlin sobre la situación política actual del país y sobre su llegada a nuestra ciudad en abril”, escribió Noguera en su cuenta de X.
Este encuentro se produjo pocas horas después de que la Municipalidad de Tafí Viejo, dirigida por Alejandra Rodríguez—esposa de Noguera—decidiera retirarse del Pacto Fiscal establecido con la Provincia. Dentro del kirchnerismo, hay quienes promueven a Noguera como candidato para diputado nacional “con el objetivo de hacer frente a (Osvaldo) Jaldo”, e incluso existen rumores sobre una posible intervención del PJ en la provincia. En Tucumán, el Partido Justicialista está presidido por Juan Manzur, mientras que Jaldo ocupa el cargo de vicepresidente.
Peronismo, la doctrina que nunca se practica y siempre se recalma
El peronismo tiene tres pilares fundamentales: justicia social, independencia económica y soberanía política. A pesar de que jamás se respetaron esos tres principios, en especial la bendita justicia social, los peronistas sienten que la “derechización” de Jaldo enfrenta esos tópicos fundamentales de la famosa “tercera posición”. La representación partidaria con el actual manejo del justicialismo en Tucumán está en crisis, pero las caras que se muestran como solución tampoco convencen.
En épocas de renovación, el PJ tucumano busca soluciones en las raíces de sus problemas, ya que dirigentes empapados de prácticas propias de la vieja política se autopostulan como los “salvadores” de una doctrina que jamás practicaron y de la que solo alimentaron sus discursos, para luego -en la práctica- hacer lo que mejor les parece.
La aparición de Cristina en escena es aun más ilustrativa del desolador presente peronista. La figura más debilitada y manchada de la democracia moderna se perfila como la reconstructora de una casa que se cae a pedazos. En ella, Noguera y Yedlin, buscan acompañamiento para incomodar a Jaldo y ¿tomar el mando del Partido Justicialsta en Tucumán?
El mensaje de anticipo noguerista
Darío Monteros informó hace días que el municipio de Tafí Viejo no fimó el acuerdo fiscal municipal correspondiente al primer semestre del presente año 2025 y se retiró del pacto que garantiza el pago de planillas salariales en los municipios a cambio de la coparticipación.
En consecuencia, el funcionario aseguró que el Gobierno de la Provincia dispuso la liberación del 100% de la coparticipación Provincial y Nacional, y del Fondo de Desarrollo Interior (FDI) para que el Municipio pueda afrontar sus obligaciones y se pueda garantizar el pago de sueldos a los empleados municipales en tiempo y forma, cómo se lo venía haciendo con el Acuerdo Fiscal Municipal.
“Se establecerán los pasos administrativos y financieros correspondientes para definir la situación de la deuda con la Contaduría General de la Provincia”, había declarado Monteros en lo que fue el primer gesto fuerte de rebeldía por parte de Noguera.