La comida se ha convertido en un tema de gran importancia en Gran Hermano. Al parecer, Furia está empezando a sentir las “consecuencias” de la falta de alimentación. Después de perder una nueva prueba semanal, el presupuesto para la compra de insumos ha generado caos y han recibido muy poca comida por el dinero asignado.
Hace varias semanas que los concursantes no logran superar las actividades propuestas por el programa para obtener suficiente dinero para comprar alimentos. Como resultado, cada vez que van al supermercado dentro de la casa, encuentran menos productos disponibles.
Además de esto, en los últimos días ha surgido una intensa discusión sobre los cigarrillos que consumen tanto Juliana Scaglione como Emmanuel Vich, lo que ha generado discrepancias entre los participantes del reality show. La situación llegó al punto en que no solo intercambiaron opiniones a gritos, sino que también decidieron dividir el dinero disponible para que cada uno pueda comprar lo que desee.
La preocupación por la salud de Furia en Gran Hermano surge por varias razones. En primer lugar, está consumiendo muy poca comida debido a la escasez de alimentos disponibles. Además, ha gastado gran parte de su dinero en cigarrillos debido a su adicción a la nicotina, lo que ha dejado poco presupuesto para comprar alimentos, lo que está afectando su alimentación diaria.
Además, Furia ha decidido no aceptar ninguna ayuda alimenticia de sus compañeros, afirmando que “no comerá nada”. Esta decisión aumenta la preocupación por su salud, ya que está privándose de la nutrición necesaria para mantenerse saludable.
En resumen, la combinación de escasez de alimentos, gasto excesivo en cigarrillos y la negativa de Furia a recibir ayuda alimenticia de sus compañeros está generando preocupaciones sobre su bienestar y salud dentro de la casa de Gran Hermano.