El fútbol argentino presenta situaciones peculiares y una de ellas se observó durante el fin de semana en el Torneo de Ascenso. En la Categoría Primera C, ubicada en el cuarto puesto del fútbol metropolitano en la AFA, se encontraban Ituzaingó y Yupanqui cuando el equipo verde tuvo una oportunidad de anotar, que fue defendida por la defensa visitante… pero de forma sorprendente, se consideró como gol, aunque al final fue anulada por solicitud e intervención… ¡del presidente del club!
Se desarrollaba el minuto 15 del segundo tiempo, con el marcador 0 a 0, cuando ocurrió la situación polémica y escandalosa. Ituzaingó atacó y se produjo una jugada que parecía ser una falta penal, pero el árbitro, Mariano Seco, no pitó nada. El juego continuó, la pelota quedó cerca del arco y un defensor de Yupanqui logró despejar sobre la línea de fondo, pero a más de un metro del arco. Sin embargo, el árbitro asistente consideró que era gol.
El juez de línea optó por levantar la bandera y dirigirse hacia el centro del campo, señalando que era gol. Una decisión inusual, dado que la pelota nunca estuvo cerca de ingresar siquiera al arco. De inmediato, los jugadores de Yupanqui comenzaron a protestar al sentirse perjudicados por la invención del asistente y del árbitro. Pero todo cambió con la intervención del presidente del club visitante.
Dante Majori, quien además es el presidente de la categoría en la AFA, apareció en el terreno de juego haciendo gestos y reclamando al árbitro. “Majori pidió calma a sus jugadores. E intentó acercarse a Seco, pero este retrocediendo declaraba ‘no voy a hablar con nadie'”, explicó Yupanqui en un comunicado, tratando de justificar la actuación de su presidente, que según el club, no debería haber intervenido con el equipo arbitral. No obstante, luego del reclamo, Seco dialogó con su asistente y finalmente optó por modificar su decisión inicial. Aunque se evitó un escándalo, dado que la pelota nunca ingresó al arco y no había cómo validar como gol, la decisión final también resultó peculiar.
Esta jugada tenía dos desenlaces válidos. O penalti a favor de Ituzaingó, por la infracción del defensor de Yupanqui, o bien saque de esquina, ya que el último jugador de campo en tocar la pelota era un jugador visitante, pero sin saque de meta. Finalmente, todo terminó ahí y no hubo un escándalo mayor por la intervención del presidente de Yupanqui. El partido concluyó con un 0 a 0.