El jefe de Gabinete, Manuel Adorni, ratificó que uno de los ejes centrales de esta nueva etapa de la gestión de Javier Milei será la modernización del sistema laboral argentino, a la que definió como “revolucionaria” y necesaria para adaptar las relaciones de trabajo a la realidad económica actual.
Durante una entrevista en La Casa Stream, Adorni explicó que no se trata de una reforma tradicional sino de una “modernización” del marco normativo, que busca actualizar leyes concebidas en otro contexto productivo. “Gran parte de los trabajos sobre los que se pensó la ley laboral ya no existen. Un montón de trabajos que hoy hay no están contemplados. Nos quedamos atrás”, afirmó.
El funcionario subrayó que existe un consenso amplio respecto de la necesidad de avanzar en esta dirección. “Va a ser revolucionario el tema de la modernización laboral. Hay un consenso mayoritario de que la necesitamos. Después discutiremos los matices, pero estamos de acuerdo en que esto así no va más”, señaló.

Adorni hizo hincapié en que el principal desafío es integrar al sistema formal a la mitad de los trabajadores que hoy se desempeñan en la informalidad. “Cuando hay un 50 % de informalidad laboral no podés decir que la modernización va a quitar derechos, porque esa gente ya no tiene derechos. Hay que sumarlos al sistema”, remarcó.
En esa línea, sostuvo que el objetivo del Gobierno es generar un marco más equitativo y competitivo, en beneficio tanto de empleadores como de empleados. “Cualquier sindicalista que quiera lo mejor para sus trabajadores también va a estar de acuerdo. Es para todos. Este esquema laboral no tiene defensa”, expresó.
Entre los puntos de la iniciativa que el Ejecutivo enviará al Congreso, Adorni destacó la posibilidad de regionalizar los convenios colectivos de trabajo. “No puede ser que la fábrica de una automotriz con tecnología de punta tenga los mismos convenios que una empresa con otra tecnología a 3.000 kilómetros de Buenos Aires. Hay que permitir que los acuerdos entre empleador y empleado se adapten a cada realidad productiva”, explicó.
El nuevo jefe de Gabinete también se refirió a su designación, tras la salida de Guillermo Francos, y afirmó que trabajará para consolidar los avances alcanzados durante el primer tramo del Gobierno. “Guillermo ha hecho un gran laburo, salieron leyes que sin él quizás no hubieran sido posibles. Ojalá pueda estar a su altura”, dijo.
Adorni, quien jurará formalmente este miércoles, destacó además el contacto cotidiano que mantiene con los distintos ministerios y funcionarios. “Durante los últimos dos años estuve en diálogo permanente con todos los sectores del Gobierno. Eso me da una ventaja enorme para coordinar el trabajo de esta nueva etapa”, señaló.
Por último, desestimó las versiones de internas dentro del Gabinete y destacó su buena relación con el asesor presidencial Santiago Caputo. “Siempre me llevé bien con él, desde el primer día. Es una de las personas con las que tengo trato diario”, aseguró.
Con estas definiciones, Adorni dejó en claro que la modernización laboral forma parte del núcleo central de la segunda fase del Gobierno de Javier Milei, orientada a dinamizar el mercado de trabajo, promover la inversión y generar un marco más moderno, flexible y transparente para el empleo en la Argentina.



