El futbolista argentino Giuliano Simeone salió a correr una pelota en el duelo Espanyol-Atlético Madrid, se dio un autopase, le quedó larga, salió de la línea y no llegó a buscarla porque se topó con el asistente, que quedó patas para arriba y dejó una de las imágenes del fin de semana.
Un divertido momento se vivió en La Liga española, durante el choque entre el Espanyol y el Atlético Madrid. Giuliano Simeone y un árbitro de línea se encontraron inesperadamente y este último terminó tirado en el campo de juego patas arriba y se viralizó en redes.
El argentino que viene de marcarle un golazo a Brasil quiso salir de contraataque tras recibir una pelota larga del arquero. Marcado por dos, siguió y se dio un autopase, pero no tuvo suerte. Otra vez le quedó lejos y, cuando quiso ir a buscarla, salió de la línea y se topó con el árbitro, que estaba atento a la jugada y salió corriendo.
Claro, quedó de espaldas y Simeone continuó el paso por el envión y terminó golpeando con el juez que se cayó de a poco, hasta terminar cabeza abajo y piernas arriba, en una semi vertical. Pero no le importó mucho. Como si nada hubiera pasado, se río de su propia caída, se levantó inmediatamente y siguió con el trabajo.