La relación entre Nación y las Provincias comienza a endurecerse por la necesidad de bajar la carga tributaria. Entre ellos está Jaldo, quien no comparte la petición de Caputo, ya que ingresos brutos representa el 83% de la recaudación tucumana.
Mientra el Gobierno Nacional requiere la baja de impuestos provinciales y tasas municipales, los Ejecutivos provinciales se contraponen y piden la supresión de retenciones y el tratamiento de un nuevo presupuesto. Los gobernadores temen que las arcas de sus distritos se vean azotadas por la baja recaudación.
La gestión de Javier Milei sigue apretando el acelerador en camino a su destino invariable: el cambio. Sin embargo, la profundidad de dicha metamorfosis institucional, política, social y sobre todo económica, trae ciertas rispideces con el resto de funcionarios y gobernantes. Tal es así que algunos mandatarios reclaman eliminar retenciones y otros, entre ellos Jaldo, debatir el presupuesto nacional 2025. Sumado a eso, hace unos días llegaron críticas del mileismo a las tasas municipales que se cobran en los servicios públicos, como sucede en varios municipios de la provincia.
Después de un año de cercanía por conveniencia política, Jaldo comienza a escurrirse sigilosamente del lado de los funcionarios nacionales, debido a que la relación entre la Nación y Provincias no se presenta del todo tranquila en las últimas semanas. El mileísmo exige una administración eficiente, austera y responsable con los recursos propios de los distritos, pidiéndo claras señales de autosuficencia provincial, lo que sería un ideal en el paraíso liberal.

Pese a ello, los mandatarios creen que esto no sería posible debido al excesivo gasto que se fue alimentando con la complicidad de gobiernos anteriores; ahí es donde el conflicto parece tener su núcleo mas ardiente. Tucumán, debido al pase de facturas que la administración libertaria les hace a los mandatarios locales para que comiencen a reducir tasas e impuestos que son concebidos como distorsivos, se encuentra incómoda; más aun Jaldo, quien es visto de reojo por el peronismo y el electorado derechista.
Esta planteo se da en un contexto donde, por un lado, gobernadores de la zona centro del país le reclaman al presidente Javier Milei que elimine las retenciones al campo, mientras que otros mandatarios, objetan la no inclusión del Presupuesto Nacional en el tratamiento de temas en las sesiones extraordinarias convocadas para enero y febrero. Justamente, en este último lote, podría inscribirse a Osvaldo Jaldo. Los enunciados de Caputo y las devoluiones de las provincias llevan el entredicho político a un punto de inflexión en pleno año electoral.
Declaraciones de Jaldo hablando de su preocupación
“Hay una preocupación muy grande como es el hecho que el Gobierno Nacional no tenga presupuesto. Puso en vigencia el del 2023, que está bastante desactualizado y es un presupuesto donde lo administra directamente el Jefe de Gabinete. Es un presupuesto que no está desagregado por cantidad de recursos y gastos, por lo que si querremos ver qué le corresponde a cada provincia, lamentablemente, no lo tenemos a disposición. Como tampoco tenemos la información sobre los fondos que le corresponden a las áreas como educación o seguridad. Es problemático que no haya un presupuesto nacional”, reclamó el Gobernador este martes.
El miedo mayor
Casa de Gobierno se vio sacudida por la insistencia del mileísmo en comenzar a desbaratar tributos tales como Ingresos Brutos, que en nuestra provincia y de acuerdo a lo pautado en el Presupuesto local para este año, comprende el 83,2% de la totalidad de la recaudación por parte de la Dirección General de Rentas, seguida de los montos obtenidos por el Impuesto a los Sellos, Automotores, Salud Pública e Inmobiliario. De una torta de $601 mil millones, $500 mil millones corresponden a este impuesto. Que, en un panorama donde se retacean fondos federales como consecuencia de la caída de la coparticipación, los recursos propios son considerados fundamentales.
Caputo: “vinimos a bajar impuestos”
El ministro de Economía salió a responder y dejó en claro el objetivo del Gobierno: “Estimados, en caso que no haya quedado claro, este gobierno vino a bajar impuestos”. “A las provincias y municipios les digo que están cordialmente invitados a esta tarea. Todavía no hemos visto una provincia reducir Ingresos Brutos, sin lugar a dudas EL PEOR IMPUESTO que una economía puede tener”, reclamó el titular del Ministerio de Economía por medio de su cuenta oficial de “X”.
“Sepan que TODOS los días analizamos la situación financiera del país, para ver si podemos seguir bajando impuestos. No necesitamos a nadie que nos lo venga a recordar, porque A ESO HEMOS VENIDO”, enfatizó.
Por otra parte, Caputo insistió que la administración de Javier Milei llegó para “bajar impuestos”. “Solo que, producto del desastre heredado y nuestro pésimo historial crediticio, solo podemos hacerlo si tenemos superávit fiscal”, explicó y recordó que desde que llegó Milei al Gobierno han “bajado más impuestos que cualquier otro gobierno, entre ellos el más importante, el impuesto inflacionario”.
El Ministro apuntó contra los municipios
Hace unas semanas el titular de la cartera económica elevó un pedido a las provincias para que logren interceder para que sus intendentes municipales supriman las tasas municipales. En esa misma línea, Caputo siguió disparando contra estos: “Están directamente estafando a sus vecinos con tasas municipales que no tienen ninguna correlación con las prestaciones que brindan”.
En este aspecto, vale resaltar que, en el caso de Tucumán, la Secretaría de Comercio de la Nación ya advirtió sobre posibles multas y sanciones a las empresas EDET, Naturgy y la SAT por la inclusión en sus boletas de tasas que no corresponden a los servicios específicos que brindan tales firmas. La Nación le abrió nueve sumarios por facturas irregulares en los municipios de San Miguel de Tucumán, Las Talitas, Tafí Viejo, Bella Vista y las localidades de Los Pocitos, Amberes (Monteros) y La Reducción (Lules).
“Ojalá seamos cada vez más los que entendamos que la forma más saludable para bajar impuestos es bajando el exorbitante nivel de gastos que aún hoy algunas provincias y municipios tienen”, planteó razonablemente Luis “Toto” Caputo.
Por último, el economista recordó que terminaron con el Impuesto PAIS, “otro impuesto tremendamente distorsivo”, aclaró, y destacó que redujeron “en muchos casos a cero una cantidad impactante de aranceles, en particular a los bienes de capital”.