El Gobierno nacional finalmente materializó una de sus tareas pendientes desde la aprobación de la Ley Bases, transfomar el Banco Nación en una Sociedad anónima.
La medida fue oficializada en el Boletín Oficial y había sido adelantada minutos antes por el vocero de la presidencia, Manuel Adorni; luego de quedar fuera de la ley ómnibus, la iniciativa fue impulsada por los directivos de la institución bancaria y finalmente el Banco de la Nación Argentina es una S.A.
El Gobierno mileísta decretó la conversión del Banco de la Nación Argentina (BNA) en una Sociedad Anónima (SA). Así lo hizo mediante el decreto de necesidad y urgencia (DNU) 116/2025 publicado este jueves a la madrugada en el Boletín Oficial, minutos después de que el vocero presidencial, Manuel Adorni, lo adelantara con un posteo en su cuenta de X. Según el decreto, la decisión busca modernizar la estructura operativa y jurídica del banco, alineándolo con prácticas de gobierno corporativo internacionales.
“El Presidente de la Nación acaba de firmar el decreto que transforma al Banco de la Nación Argentina en Sociedad Anónima. Dios bendiga a la República Argentina. Fin”, posteó Adorni en su cuenta oficial de X.
El escrito con carácter de ley señala que el nombre pasará a ser Banco de la Nación Argentina Sociedad Anónima (BNA S.A.) y que continuará siendo controlado mayoritariamente por el Estado Nacional, que poseerá el 99,9 % de las acciones, mientras que la Fundación Banco de la Nación Argentina tendrá el 0,1 % restante.
El Presidente de la Nación acaba de firmar el decreto que transforma al Banco de la Nación Argentina en Sociedad Anónima.
Según el decreto, la transformación permitirá “mejorar la capacidad del banco para competir en el sector financiero, optimizar la asignación de recursos y fortalecer su posición en el mercado, garantizando la continuidad de su operatividad”.
Se trata del punto final a una iniciativa llevada a cabo puertas adentro de la institución bancaria comandada por el presidente Daniel Tillard y el vice Darío Wasserman desde hace unos meses, tras cerrar el balance del año 2024 y luego de que no prosperara la intención de llevar esto a cabo en la primera versión de la Ley Ómnibus en el verano de 2024.
La conversión en una Sociedad Anónima podría permitir la entrada de capital sin que necesariamente implique su privatización y cambios tanto en la estructura interna como en los productos financieros, políticas de crédito y tarifas, orientadas a maximizar la rentabilidad.
Luis Caputo, Javier Milei y Manuel Adorni estuvieron reunidos antes de que se publique el decreto sobre el Banco Nación.

Desde que se conoció la intención de hacer cambios profundos de parte de la nueva administración, desde diferentes entidades gremiales bancarias mostraron su rechazo a la posibilidad de privatización y de conversión en SA. Según insistieron, el rol principal del banco es “dar una asistencia social a los argentinos” que es “irrenunciable” y que no puede dar ningún banco privado, puesto que “estos solo buscan ganar dinero e incrementar la rentabilidad”.
Además, durante las discusiones legislativas de la Ley de Bases a mediados de 2024, el BNA fue excluido de la lista de empresas a privatizar, reflejando la resistencia política a su transformación en SA.
Pese a las críticas, la presidencia del banco continuó con sus planes y hace menos de un mes, habían sido anticipados por algunos detalles sobre la conversión a SA a través de un comunicado de prensa.
“Banco Nación ya cerró su balance especial de transformación al 31/12/2024 y la nueva Sociedad Anónima tendrá activos por $ 48 billones, depósitos y otras obligaciones por $ 33 billones. En tanto, el Patrimonio Neto (PN) de la SA ascendería a $ 15 billones”, explicaron en aquel comunicado de prensa.
La transformación en sociedad anónima, según sostuvieron, es algo “imprescindible” si es que se busca continuar aumentado los préstamos “a favor de las PyMEs y las familias”.
“Para sostener ese crecimiento, la institución necesitará ampliar su fondeo, lo que podrá hacer abriendo su capital, para lo cual es esencial que se convierta en Sociedad Anónima y que tenga la aprobación del Congreso”, enfatizaron.
En ese sentido, precisaron que “el capital social será un valor nominal determinado en el estatuto y el valor de la acción resultará de dividir el PN por el capital social”.
La Sociedad Anónima tendrá una cartera de préstamos de $15 billones al 1/01/2025 con “la mejor tasa de cobrabilidad de la historia reciente”, ya que los desembolsos del Banco tuvieron un crecimiento extraordinario en 2024 (más de 600%).
Según añadieron, a lo largo del año pasada, la “entidad aumentó su participación de mercado por más de 600 puntos básicos, alcanzando el 17,5% del total” y reafirmaron “su liderazgo en el sistema financiero cualquiera sea la medición: activos, depósitos, préstamos y patrimonio”.