El Banco de la Nación Argentina (BNA) ha cerrado su “balance especial de transformación” al 31 de diciembre de 2024, un paso clave en su proceso de conversión en Sociedad Anónima (SA). De acuerdo con los datos informados por la entidad, la futura SA contará con activos por $48 billones, depósitos y otras obligaciones por $33 billones, y un Patrimonio Neto de $15 billones.
La transformación del Banco Nación en Sociedad Anónima es una medida impulsada por el gobierno del presidente Javier Milei con el objetivo de fortalecer la capacidad de financiamiento de la entidad, permitiéndole ampliar su fondeo mediante la apertura de su capital. “La transformación en SA es imprescindible para que el Banco continúe aumentando los préstamos a favor de las pymes y las familias”, destacó la entidad en un comunicado. Asimismo, subrayó que esta conversión es esencial para que el BNA pueda mantener su liderazgo en el sistema financiero nacional.
El gobierno de Milei había incluido al Banco Nación dentro del listado de empresas públicas a privatizar en el proyecto original de la Ley Bases. Sin embargo, tras negociaciones en el Congreso, la entidad fue excluida del listado junto con YPF. No obstante, la reconversión en Sociedad Anónima se presenta como una alternativa para incrementar la eficiencia y sostenibilidad del banco en el largo plazo.
En términos de desempeño financiero, el Banco Nación cerró el 2024 con cifras récord en créditos, alcanzando desembolsos superiores a los USD 15 mil millones en préstamos para empresas y familias. Esto representó un incremento del 600% en términos nominales respecto al año anterior. La participación del BNA en el total de préstamos del sistema financiero argentino creció del 11,4% al 17,6%, consolidando su posición de liderazgo en el mercado.
El programa “+Hogares”, una de las iniciativas emblemáticas del banco, cerró el año con 3.000 créditos hipotecarios otorgados y más de 70.000 solicitudes recibidas desde su lanzamiento en mayo de 2024. Asimismo, en diciembre de 2024, la entidad otorgó créditos por USD 1.500 millones destinados a la producción industrial, PyMEs y grandes empresas, así como a individuos, reforzando su papel clave en el impulso de la actividad económica.
El proceso de transformación del Banco Nación también ha incluido una optimización de su estructura operativa. En los primeros once meses de la administración Milei, la entidad redujo su planta de empleados en 255 personas, situando su dotación en 17.191 trabajadores al 30 de noviembre de 2024. Esta medida se alinea con la política de reducción del gasto público impulsada por el gobierno nacional.
Desde el Banco Nación destacaron que la conversión en Sociedad Anónima no afectará su rol estratégico dentro del sistema financiero argentino, sino que lo fortalecerá al permitirle captar nuevos fondos y mejorar su eficiencia operativa. En este sentido, la entidad subrayó que la transformación responde a la visión del gobierno de Milei de avanzar hacia una economía más eficiente, con menor intervención estatal y mayor protagonismo del sector privado.
La aprobación del Congreso será un paso fundamental en este proceso, ya que permitirá que el Banco Nación se adapte a un esquema de gestión más dinámico y orientado a la competitividad. Con esta medida, la entidad busca consolidar su crecimiento y seguir brindando financiamiento accesible a empresas y familias, en línea con las políticas económicas del gobierno actual.
La decisión de avanzar con esta transformación ha generado expectativas en el ámbito financiero y político, ya que representa un cambio estructural en la forma en que opera el principal banco público del país. A medida que se concrete la transición a Sociedad Anónima, se espera que el Banco Nación continúe desempeñando un rol clave en la economía argentina, pero con una estructura más eficiente y alineada con los principios de mercado promovidos por la actual administración.
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Redactor: Quirós Joaquín