El jefe del Estado Mayor Conjunto de la Fuerzas Armadas, teniente general, Juan Martín, defendió a la vicepresidente electa Victoria Villarruel, en su postura en torno a la violencia de la década de 1970 y el accionar desempeñado por las fuerzas armadas argentinas previo y durante la dictadura militar.
Martín, al ser consultado por la posición de la Vicepresidente y la acusación realizada por sectores de ultra izquierda que la consideran como “negacionista” sobre los hechos acaecidos durante el régimen militar, dijo: “yo no creo que –Villarruel- sea negacionista. Nunca la escuché reivindicar al gobierno militar, sí tuvo contacto con presos pero ella misma explicó que estaba en el marco de un libro que estaba escribiendo pero tampoco está prohibido tomar contacto”.
Y señaló: “Yo interpreto que el negacionismo es decir: ‘No existió un golpe de Estado o no se cometieron delitos de lesa humanidad’. Eso yo no se lo escuché. Así que desde ese punto de vista, bueno, ella tiene toda una carrera que se dedicó mucho a investigar bien el tema y convengamos que dentro de lo que es el tema de los ‘70 nosotros somos absolutamente respetuosos de las decisiones judiciales, aquellos que tienen condenas firmes tienen que cumplir con lo que dice la Justicia”.
Amplió además: “Nosotros creemos y defendemos la independencia de los tres poderes. Quienes tengan condena firme tienen que cumplirla como cualquier ciudadano. Ahora esto no quita que también pretendemos que, como ciudadanos comunes que somos, también hay derechos constitucionales que deben respetarse y ocurren situaciones sobre todo con la gente que está detenida bajo proceso, que no tienen los juicios, y el Código Procesal habla claramente que no se puede tener detenida a una persona sin proceso más de dos años y eso en muchos casos no se está cumpliendo”.
“Y lo mismo con aquellos que tienen más de 70 años y tienen comprobados problemas de salud, su condiciones de militar o ex militar no lo priva de sus derechos constitucionales. Me asombra en cierta forma que la Justicia todavía permita que haya casos de ese tipo, donde no se respeten garantías procesales. Hay gente que está cerca de los diez años en esa situación. Creo que como país nos tendríamos que cuestionar esta situación. Esto también es un derecho humano fundamental”, razonó.
Sobre los dichos de Villarruel en torno a los terroristas que cometieron crímenes de lesa humanidad en nombre de agrupaciones armadas como Montoneros y ERP, dijo: “Es un problemas más de la Justicia que del gobierno. Es la Justicia la que tiene que dar explicaciones en ese caso. Uno de los principales valores que se buscó consolidar entre los integrantes de las Fuerzas Armadas, e irradiarlo hacia la sociedad, es que los militares debemos estar por fuera de cualquier división política o grieta. Las instituciones armadas son instituciones de la República, no partidarias. Si en el pasado fuimos un factor de inestabilidad política por la presencia permanente en ese escenario, asumiendo funciones impropias, desde el regreso de la democracia se ha ido consolidando la idea que las Fuerzas Armadas son garantes de la estabilidad institucional y gobernabilidad”.