Un perro raza Pit Bull Terrier Americano volvió a ser noticia nuevamente en Tucumán tras haber atacado salvajemente a tres niños que caminaban junto a su madre en avenida América y Anchorena, San Miguel de Tucumán.
El sabueso se escapó de una vivienda a través de su portón de acceso que habría estado abierto y arremetió directamente sobre uno de los pequeños, agrediendo luego a sus dos hermanas y provocándoles lesiones gravísimas. Los tres hermanitos se encuentran hoy bajo tratamiento reservado en el Hospital del Niño de Jesús.
Así lo relató en un mensaje que envió a la Redacción de Tucumán Digital: “Anoche a las 23.00 fuimos a comer a la casa de un familiar que vive en Anchorena al 3400. Caminaba con mis tres hijos cuando de mano derecha salió un perro raza Pit Bull. Salió directo a morder a mi hijo, le agarró las zapatillas y todavía no sé cómo logró escapar del perro. No habiendo logrado lastimarlo, el perro dio la vuelta buscando a una de mis hijas, quien alzó a levantar a su hermana más pequeña en brazos. Mientras el perro le mordía un pie, logró sacarse las zapatillas, evitando que le destroce su pie”.

“El perro soltó la zapatilla. Y saltó sobre las más pequeña de mis hijas y la tiró al piso produciéndole golpes en la cabeza y la arrastró mordiéndole la piernita. Esto le produjo fracturas y cortes de hasta tres centímetros”, contó y dijo que mientras todo ello sucedía tuvo que patear al canino.
“En un momento apareció el dueño del perro. Lo agarró y lo metió en su casa. Luego de ver la escena de mis tres hijos con sangre, me preguntó si yo le había abierto la puerta de su casa. Cosa que es insólita”, sostuvo
“Mi padrino de inmediato corrió a socorrer. Llegó mi mamá a auxiliar a los que estaban tirados en el piso en estado de shock. Mis familiares y vecinos corrieron por la calle a ayudar. Mientras le gritaban al dueño ‘asesino’ ”, contó.
Mientras tanto, la mujer trataba de calmar a su hijo que tiene Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
“Unos vecinos de mi tío se ofrecieron a llevarme al Hospital de Niños porque el 911 se tardó una eternidad. A mis dos hijas las intervinieron de urgencia, siendo la menor la que está en más grave estado. Internada con morfina por la magnitud del dolor” y contó que el dueño del animal no quiso informar si el perro tenía colocada la vacuna antirrábica por lo que sus hijos tendrán que ser estudiados por un infectólogo.
“Cuando fui a hacer la denuncia a la Policía. El dueño del perro se nos río en la cara y dijo que es oficial de la Policía de Tucumán que no iba a aportar datos. Hizo abandono de persona. Debería estar preso. Pido justicia por mis hijos que hoy lloran de miedo y de sufrimiento por tanto dolor”, comentó.